Es posible que uno de los aportes más importantes de la antroplogía al pensamiento contemporáneo sea la constatación de la relatividad cutlural.
Este concepto supone que no existen valores absolutos cuya validez pueda ser considerada universal. Por ejemplo, el consumo de un determinado producto (como una droga) que en una sociedad pueda ser considerado motivo de marginación o exclusión, puede ser una exigencia para miembros de otras sociedades.
Se cree que tal vez a excepción de la relación madre-hijo, fuertemente determinada por un componente biológico, las relaciones y costumbres que rigen cada cultura, no pueden ser asimiladas a un patrón único ya que son tan variadas como la misma diversidad humana.